jueves, 17 de enero de 2008

El Reino del Mar-keting



Los primeros días de enero con su histeria y frenética actividad concentran mas del 80% de las actividades del balneario. Fiestas varias compiten contra desfiles, conciertos, torneos de tennis, polo, rugby, presentaciones de libros, carreras de autos clásicos, todos tratando de captar a un mareado publico que corre de un lado a otro tratando de no quedarse afuera del ese “imperdible” evento. En esta época son infaltables los lanzamientos de edificios y emprendimientos, con su consiguiente marketing y venta de un estilo de vida privilegiado que solo se puede conseguir en X, como publicitan los atractivos folletos destinados a seducirnos en soltar los dolares o euros en asegurarnos un lugarcito en el reino de los elegidos.



Espejitos de colores, eso es lo que vi hace unos días en el lanzamiento de un edificio en un lugar improbable que publicitaban como el nuevo “Art District” (la Avenida Roosevelt) que hasta donde yo se, lo mas artístico que tiene es un par de mueblerias. Mucho ruido y pocas nueces me pareció la cosa. Comprar el nombre de un diseñador famoso y marketinero, una estructura abandonada en la Roosevelt y a eso sazonarlo con mucho condimento anaranjado, en un producto destinado a: A quien me pregunto yo? A los jóvenes y ya no tanto que quieren el glamour de vivir en un edificio “inspirado” por este diseñador responsable de un par de famosos hoteles en Miami y Nueva York?? A extranjeros que realmente se crean que la Avenida Roosevelt es el nuevo “Art District”? Punta del Este nunca deja de asombrarme.

Ayer tuve otra experiencia que ilustra esta crónica, estuve buscando un regalo para una amiga que cumple años el 9 de enero, siempre me pasa lo mismo, me enojo conmigo misma por no haber pensado en comprarle el regalo antes en algún lugar mas lógico y no tener que pagar precios de “principios de enero” por cosas que muchas veces no valen ni la mitad. Decidí buscarle un regalo en un gran galpón a la entrada de Punta del Este que vende en su mayoría ropa, muebles y accesorios traídos de la India, pero bajo la marca de dueña del negocio. Las cosas no son demasiado distintas que las que vende el “Indian Emporium” a una fracción de lo que aquí cuestan, pero uno esta pagando por un poco de “glamour” que parece ser tan necesario en esta ciudad. No hace falta decir que mi amiga se quedo sin regalo “glamoroso” ya que me niego a pagar precios exorbitantes por cosas que no lo valen. En fin… de eso vive Punta del Este en gran parte, y vivan los espejitos! Mientras sean otros los que los compren y nosotros los que los vendemos.



1 comentario:

Anónimo dijo...

Se nota que no conoces Punta del Este, deberias conocerlo antes de dar opiniones sobre distritos y edificios. Para empezar el Edifio Yoo es una ganga a mi entender, comprar un apartamento por U$S 1.200 el m2 no lo consiguen ni el la Aguada, Montevideo.... Luego los servicios, el cine, los pisos de marmol, tenes alguna idea de construccion??? Me parece que no...